Compiladito

Yo nunca quise ser un blog, bah, nadie me lo preguntó tampoco, nadie quiso que yo esté escuchando Black Sabbath tampoco, que se yo... son cosas que se dan...

Entre mayor es la presión del ambiente (Por ejemplo, la elevada cantidad de respuestas que debo emitir a lo largo del ciclo vital, empezando por necesidades fisiológicas, pero pasando por otras un tanto más complejas y cuya realización depende de cantidades ingentes de energía de mi aparato psíquico), más fuerza hago para pelotudear (Dícese de toda respuesta del organismo que no tiene, posible o visiblemente, consecuencias favorables para la vida del que las practica, más de aquellas que cumple un pasatiempo, pero que incluso pueden conllevar a riesgos físicos, psíquicos o sociales, tales como fracturas, lesiones neuronales, fatiga, e incluso suicidio social), mayores son mis ganas de complejizar las cosas, de analizar hasta lo simple que se toma por evidente, un presupuesto filosófico me invade (el de lisa y llanamente, analizar todo aquello a lo que ya nos hemos acostumbrado, buscando responder la pregunta que hace uno ante cualquier acto que no comprende: ¿Por qué?... La misma pregunta con la cual los más pequeños se divierten a costa de nosotros y de nuestra ignorancia en las cosas que ya hemos naturalizado) cuando tengo que ocupar mis energías atencionales en las más complejas entidades abstractas (aunque no estoy absolutamente seguro de tal afirmación, si puedo decir que el hecho de que todavía no se pueda explicar la conducta de modo detallado, incluyendo predicciones de actos futuros o su posible control experimental, determina en gran medida que la complejidad del tema evita alcanzar fácilmente una respuesta a razonamientos de tal tipo) de las cuales surge lo que nosotros manifestamos como todo aquello que hacemos aun a costa (o a pesar) de nuestra voluntad más férrea e inamovible (aquella que últimamente se puede emparentar con el concepto de resiliencia, es decir, la fuerza que saca un sujeto determinado para afrontar a los hechos "a viento y marea", es decir, cumple con espectativas que superan ampliamente las esperadas para su grupo etario, o si bien no superan, son distintas al basarse posiblemente en otros ideales o metas para que hacer con su existencia, grado que resulta poco útil para analizar, pero como suele escucharse en diversos prostíbulos de bajos recursos "Es lo que hay" ), que se da como consecuencia de la creencia en aquello que no se mueve al dar vuelta al mundo, la famosa palanca que permite saltos cualitativos en la capacidad del razonar humano, que permite pasar de uno a otro estadio de la inteligencia Piagetiana (Que, a pesar de nuestras creencias, puede no terminar en el periodo de operaciones formales abstractas, ya que ahí es desde donde nos paramos y no podemos ver lo que está más arriba) permitiendo progresivos aumentos de conciencias, hasta llegar a puntos insospechados vistos desde nuestro estado actual de las cosas (como por ejemplo, recuerde los pensamientos que se tenían en la década de los 50´ acerca de lo que pasaría en el cambio de milenio, es decir, el 2001) y volviendo a lo que les estaba hablando, escribí esto para no hacer otra cosa.

Sin más infortunios que comunicarles, por la presente me despido de todos aquellos a los cuales nunca veré, y no veré nunca más, pero solo un "Hasta Luego" a aquellos que se permitan seguir juntando con personaje tan poco controversial, vano e incluso inadaptado como el actual.

Si son de los que miran Sony, recuerden hacerlo en un televisor compatible, por el tema de los jucios. Y no lo miren si están sin comer, ni entre las 12:32 y las 12:62; es perjudicial para su perro.