20.9.09

La libertad absoluta es también una prisión absoluta.

Las posibilidades son infinitas. Y ese es justamente el problema: estar encerrado afuera.

Sí, exactamente como suena. La mente está hecha para solucionar cuestiones que la no-mente no entiende; pero tiene también sus bugs, y la infinitud de posibilidades es uno de sus agujeros.

Una mente, ante una elección de carácter binario puede calcular los resultados relativos de ambas (según reglas definidas, y algo de "intuición"), y decidirse por alguna de ellas (en el mejor de los casos). Ahora, si no se puede reducir los factores hasta algo manejable lógicamente, nos queda la ilogicidad de la mente para jugar. Ya no son reglas: son principios.

Los principios que guian nuestro accionar son de carácter variado, van rotando además según las condiciones en que nos encontremos. Pero tienen una particularidad que los vuelve necesarios: son moldes de conducta. Sin ellos estamos en un campo vacío, sin fuerzas ni deseos. Todos necesitamos querer algo, odiar algo, motivarnos para luchar, y también ser irracionales en los fines (no debe haber fines razonables; deben ser infinitos como la felicidad. Ahora, los medios para conseguirla son otro cantar).

Me gustaría que te preguntases por tus principios, por tus objetivos de vida. Y ahora, motivate para conseguirlos. No disperses, la concentración será aburrida pero es el modo de lograr las cosas. Y una vez empezado el camino, está atento a las señales, pero no te olvides de tu objetivo. El barco siempre se puede abandonar, pero...

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿cuales son tus principios, tus objetivos? vos ya te lo planteaste. es raro pero a veces uno es tan pajero que en vez de resolver sus problemas le gusta escuchar como los resuelven los demas para ver si..
M