critica

No tengo idea. Estoy cansado, y me faltan motivos. Hay veces que pienso que nada tiene sentido. Nada de nada. Y en esos momentos, me relajo, y acepto. No hay nada que yo pueda hacer para ello, digamos que si fabrico los sentidos, sabría que son falsos. Y los que me venden no me parecen mucho mejores. Entonces, ¿Para qué molestarse?

Supongo que me gusta molestarme en esas cosas. Cuando uno tiene espíritu crítico, tiene que mantenerlo así, nada de ablandarse ni relajarse en demasía. Me ha pasado, estando divirtiéndome, sentir la necesidad de volver a tener el control. Me es difícil aceptar las cosas tal cual son, es parte de mi inconformismo, y sé que me estoy negando felicidad, pero menos feliz sería si no pudiera ser como soy. Es decir, sería menos feliz si tratara de ser feliz, dejándome llevar.

Estoy algo acostumbrado a estados de stress moderados. Creo que hasta soy adicto. Y no es algo que me produzca daños, bah, no me parece. Uno nunca sabe de esas cosas, pero por ahora nunca toqué el punto límite. Aunque me vendría bien un poco de relax, tiene que ser algo especial.

Y con algo especial no me refiero a un crucero a las Bahamas. Creo que con una sonrisa sincera y un puñado de palabras es suficiente.