10.7.08

I Surrender III

Esto es solamente cuestión de manterner el paso. Sé que toda mi atención se dispersa rápidamente hacia elementos que quizás no la necesiten, pero en el fondo, sé que debo concentrarme. A veces es mejor ser muy bueno en algo que estándar en todo, pero de la generalización también viene una sensación de amplitud, de poder hacer todo lo que quieras. La física cuántica, armamentos, teoría de juego, programación, filosofía, matemáticas, teorías políticas, música, artes marciales, literatura, cine, computación, artesanías, reparaciones hogareñas varias, posmodernismo, comics, café, juegos de rol, ateísmo, sátiras, demasiado para un solo hombre. Hobbies queridos, hobbies amados, no podría sino tenerlos. No podría no decir que el mate quedó "en tierra de nadie". No podría no hablar de las "horas ninja" de la facultad. No podría no quedar como un nerd al explicarle a alguien la relación de indeterminación de Heisenberg, o los agujeros negros, o la fuerza de coriolis, o por qué la velocidad de la luz es inalcanzable según un viejo alemán. Sé que cada vez que hablo de Polifemo meto la pata. Que cada vez que menciono la ética según Foucault estoy cometiendo un error. Que cada vez que nombro el arma que porta el protagonista de la película pochoclera, a la vez que cuento cuántas balas le quedan, estoy haciendo algo mal. Sí, lo estoy diciendo.

Un poco es callarse la boca. Y otro poco es decir lo que uno tiene ganas de decir. Tarde aprendí que existe otra gente, y no porque yo fuera creído ni nada por el estilo. Puedo afirmar (y sin estar orgulloso de ello) que no he tenido amigos hasta, más o menos 7º grado. Y aun así, los amigos que he tenido me han durado poco, un poco por cansancio, y otro poco porque las relaciones se cortan. Aprendí muy tarde lo que es estar en pareja. Aprendí muy tarde lo que es guardar un secreto. Debilidad es no saber cómo comunicarse.

Aunque sea extraño, aunque sea paradójico, soy introvertdio. Necesito estar solo, más allá de lo que pueda hablar con otros. La comunicación humana me desgasta; me recargo estando solo. Y no es porque sea un inepto. Antes podría decir que no sabía cómo comunicarme. Ahora puedo dar una clase a 40 personas. Pero todavía me desgasta el contacto humano. Y por eso no creo cuando me hablan de que sé hablar, de que se entiende cuando hablo, de que no hago papelones. No entiendo porque no lo siento así. Siento un esfuerzo terrible para hablar en público, siento que me desgasta por dentro.

Es duro pensar que uno está bien solo. Y uno no sabe si es una excusa o una esencia; si es algo debido a que uno está solo, o si es algo más profundo, que te acompaña hasta cuando hay un otro... (los puntos suspensivos implican que no sigo escribiendo pero que esto continua. No se crean ustedes, lectores inexistentes, que esto termina acá)

2 comentarios:

Chole. dijo...

¿puedo comentar? Es que suena muy personal e introspectivo lo que escribís. (Pero bueno, siempre leo tus escritos, a pesar de que nunca encuentro algo significativo que comentar y entonces callo).
Siento que conozco un poco sobre lo que escribís del desgaste de la comunicación y la necesidad del descanso y soledad sobre los demás.
Me recuerda algo que me digo ocasionalmente... y porque no, lo comento con vos.
"El tema es que, a este mundo venimos solos y nos vamos solos, pero en medio, compartimos la vida y manejamos muchas cosas de esta, de acuerdo a la buena y mala gente que nos acompaña en distintos niveles. Pero, pienso que por encima de todo, lo más importante, es manejarse y llevarse bien con uno mismo, ya que es con la persona que vas a tener que convivir hasta que te acuestes con la tierra."
Vos decís "Es duro pensar que uno está bien solo". Pero pienso que por más duro que sea, no es una realidad para todos. Hay gente que no tolera estar en soledad, que necesita de ruido y gente para no pensar, si está solo pone la televisión, e incluso hay gente que almuerza en familia y prenden la televisión con la razón de no hablar, ni pensar.
Personalmente creo que es más duro no poder estar con uno mismo, que saber que uno está bien solo.

Y. dijo...

Todo bien que comentes!
Es que esto último me salió así, sin ni siquiera pensarlo. Dicen que es más uno, no?

Con respecto a lo que decís, tenés razón. "Personalmente creo que es más duro no poder estar con uno mismo, que saber que uno está bien solo". Lo que cuesta por ahí es aprender a combinar, estar solo y también estar acompañado, alternando y midiendo bien.
De momento, necesito más silencio que ruido, más soledad que vínculos, pero también sería bestial decir que uno no necesita a otra persona.

Saludos!