11.5.09

¿Hay que ser pretencioso al escribir?

Hoy estoy normativo, y por ello me pregunto sobre las pretensiones (que no sé si son pretenciosas, nótese la s y la c, pero eso es otra pretensión) de un escritor. Ya, por lo menos en parte, creemos que estas secuencias de letras son más importantes que otras, tanto más para que escapen de la cadena temporal del habla y se graben en algún medio. Ahora, por ese precio de cierta resistencia al pase del tiempo, ¿tendrían que ser pensadas demasiado?

Ahora que decidimos escribir algo, tenemos que decidir cuánto de ello será editado mortalmente. Me sorprende muchas veces, y me agrada, la literatura espontánea (que a muchos les repulsa, pero no es tan importante) en la que se transforman trenes de pensamiento en textos. Un insulto a la pedantería gráfica, si me preguntan. Pero también me sorprenden los textos gloriosos, cuya acomodación de letras va más allá de la simple transmisión de información; textos que tienen métricas propias, formas en las formas, y que por sobre todo, respetan las reglas académicas.

Entre los anarquistas literarios y los paladines de la estructura lingüística hay un largo trecho, pero a todos nos corresponde más o menos una ubicación entre ambos polos (aunque quizás no sean polos, sino variables independientes; como la talla de los pantalones y el color de la remera).

A veces los anarquistas fallan en sus intentos de originalidad (quizás dicen tanto que no pueden comunicarse). A veces los paladines fallan en la actualización del idioma (quizás se censuran tanto que no dicen nada). A veces, al escribir nos vamos por senderos locos, que no tienen ni principio. A veces, damos la vuelta del perro, por donde todo el mundo ya pasó. A veces, escribimos demasiados "A veces"; pero nos reímos de la estructura porque nos creemos muy locos (y ya bastante locos estamos, para creer que nuestras letras son más importantes que aquellas que olvidamos).

Y si, llegado el caso, nos sentimos acorralados, podemos decirle al lector que es su trabajo encontrar el sentido (que la lectura no tiene que ser pasiva), o le podemos decir que lea lo que se le dé la gana ya que nunca pudimos terminar el Quijote. Esto depende, como es sabido, de la talla de nuestros pantalones o del color de nuestra remera.

2 comentarios:

NADIE dijo...

Siempre crei que lo que alguien considere arte es arte, lo que para alguien es mas o menos valioso lo es en tal o cual sentido. Los sabedores podran decir lo que quieran sobre tecnica y profundidad, pero aquel que de verdad a disfrutado, estudiado en forma conciente o inconciente tiene una opinion firme y valida.
PD: Me gusta este blog, y analizo sus atributos constantemente.
Un besote MR. Y(erba?)

Y. dijo...

=D

La Y significa muchas cosas...